La asociación malagueña pone en marcha un proyecto de orientación sociolaboral para los usuarios en situación de exclusión que atienden a diario.
Cada día, unas 1.800 personas acuden al comedor de la Asociación Yo Soy Tu para buscar un plato de comida para llevar a casa. “Desde la pandemia este número ha ido aumentando”, afirmó el presidente de la asociación, Emilio Gómez Ojeda, “Tenemos 700 personas y desde la pandemia no hemos bajado de 1.600”. Por eso quiere poner en marcha una de las muchas ideas que se le ocurren para acabar con la situación de las personas en riesgo de exclusión social: «Siempre lo pienso pero no tengo dinero para hacerlo.
Gracias a que lo presentamos en el concurso de la Fundación La Caixa y nos ayudaron con el proyecto – explica. Una nueva iniciativa de la Asociación Yo Soy Tu es el lanzamiento de un área social y de personal con espacio para aulas de enseñanza en alquiler, abierto todos los días de 9 a 13 horas.
“Con lo que nos dieron pudimos comprar muebles y todo el equipo tecnológico que necesitábamos para llevar nuestro negocio. Cada día, un psicólogo vocacional y un trabajador social son los responsables del proyecto”, explica Emilio Gómez Ojeda. El lanzamiento de este proyecto fue todo un éxito:
“Empezamos las clases en enero y hasta el momento se han incorporado 70 personas, 22 de ellas quienes tienen empleos. Este apoyo es fundamental para garantizar el empleo y que los usuarios puedan dejar de depender de los comedores y puedan conseguir un salario digno.
Tenemos hasta 120 personas en lista de espera para venir a clase, la verdad están motivados y con ganas de trabajar para salir del aislamiento”, dijo la directora Yo Soy Tu. Este espacio social y laboral, creado en colaboración con la Fundación La Caixa, es una ampliación del espacio de 75 metros situado al lado de la cafetería (calle Moreno Nieto).
“El objetivo es que estas personas tengan acceso a un espacio de escucha que genere confianza y establezca una hoja de ruta personalizada para trabajar con cada persona para superar los desafíos que enfrenta y fortalecerse. Este itinerario implica que los beneficiarios utilicen los recursos públicos y privados de su entorno de forma estandarizada a través de talleres y cursos organizados por nuestros expertos, todos ellos con el objetivo de desarrollar las relaciones sociales y la participación grupal”, explica detalladamente la asociación en español: “Porque aquí Hay muchos inmigrantes y apoyamos a la escuela. “Tres veces por semana también se da dinero a organizaciones destinadas a ayudar a las personas que sufren de alcoholismo”. Como resultado, algunos usuarios ya no necesitan personal de comedor, pero siguen necesitando más ayuda.
“Gracias a Dios por Bancosol que nos abastece del 80% de los alimentos que distribuimos, así como por las demás empresas y supermercados con los que trabajamos, sin ellos esto no sería posible. Sin embargo, siempre necesitamos más ayuda, tanto voluntaria como económica, para tener más recursos”, afirmó Gómez Ojeda.